Resumen
Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis asesinaron a casi seis millones de judíos
europeos. “Las SS y la policía alemana asesinaron a casi 2.700.000 judíos en los centros de
exterminio, ya sea por asfixia con gas de guerra o fusilamiento” (Enciclopedia del Holocausto,
párr. 2)
Adolf Eichmann, teniente coronel de las SS (fuerza paramilitar e instrumento de terror del
Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán durante la Alemania nazi) fue llevado a juicio en 1961.
Hannah Arendt, filósofa alemana de origen judío, se encontraba siguiendo el proceso como
corresponsal de la revista estadounidense The New Yorker. A partir de ello, Hannah publica, en
1963, el libro “Eichmann en Jerusalén. Un informe sobre la banalidad del mal”.
En este informe, Hannah Arendt se centró en estudiar, entre otros aspectos relacionados a
las causas del Holocausto, al acusado y responsable de la muerte de miles de judíos: Adolf
Eichmann, quien durante su juicio llegó a confesar que él era inocente, y que solo obedecía
órdenes.
En el presente trabajo se dará a conocer cómo se manifiesta la banalidad del mal, tal como
lo conceptualizó Hannah Arendt, en la novela “Ese camino existe” del escritor Luis Fernando
Cueto Chavarría, que aborda el conflicto armado entre el Estado y el grupo subversivo Sendero
Luminoso, a través del análisis crítico, textual y documental de los libros antes mencionados, con
la finalidad de presentar un nuevo aporte en los estudios literarios ante la escasez de
investigaciones y crítica literaria en Chimbote.